Una gallega toma el avión a Nueva York con un pasaje en clase económica.
Cuando sube al avión busca su asiento y se encuentra con los asientos de primera clase, viendo que estos son mucho más grandes y confortables, decide sentarse en el asiento que tiene su número.
La azafata revisa su boleto y le dice la chica que su asiento es de clase económica.
La gallega responde:
- Soy joven, gallega y bonita, y voy a sentarme aquí hasta llegar a Nueva York y a mi nadie me mueve.
Frustrada, la azafata va a la cabina y le informa al capitán del problema conla pasajera.
El Capitán envía al copiloto a hablar con la gallega y le confirma que su asiento es de clase económica.
La chica responde:
- Soy joven, gallega y bonita, y voy a sentarme aquí hasta llegar a Nueva York y que no se diga nada más.
El copiloto no quiere causar problemas por lo que se retira a la cabina para comentarle el problema al capitán.
El capitán dice que su novia también es gallega y que el puede hacerse cargo del problema.
Así que va a ver a la muchacha, le susurra algo al oído.
Ella inmediatamente se levanta y dice:
- Muchísimas gracias, abraza al capitán y se va a sentar a su asiento de clase económica.
El copiloto y la azafata, quienes estaban observando alucinados la escena, corren a preguntarle al capitán qué le había dicho a la gallega para convencerla.
El capitán les dice:
-Le dije que esos asientos no van a Nueva York.
jejejejejejejejeje
domingo, 6 de junio de 2010
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